Destacado esta semana
Los percloratos son las sales derivadas del ácido perclórico (HClO4). Son incoloros y no tienen olor y se producen tanto de forma natural como a través de la fabricación. La mayoría de las sales de perclorato son solubles en agua. Se han utilizado como medicamento durante más de 50 años para tratar los trastornos de la glándula tiroides.[1]